Dedicado a mi amigo heleno, Stefos Efstathios
El pasado jueves 2 de septiembre fallecía, a sus 96 años de edad, el mítico Mikis Theodorakis (1925-2021) compositor musical de la película “Zorba, el Griego” (1964), dirigida por Michael Cacoyiannis (1922-2011), que lleva el sello inolvidable de la danza Syrtaki, escenificada por Anthony Quinn (1915-2001). Un film basado en la novela “Vida y aventuras de Alexis Zorbas”, autoría de uno de los más grandes escritores y filósofos griegos del siglo XX, Nikos Kazantzakis (1883-1957).
Mikis Theodorakis fue un referente y prolijo compositor musical, con una sólida formación clásica y con un arraigado componente popular y tradicional, que traspasó fronteras no solo con su música y sus canciones, sino especialmente por su alto compromiso intelectual, por su convencido activismo político desplegado en distintas etapas de su vida: frente al fascismo italiano y al nazismo alemán; después, en 1963, con la fundación de Juventudes Lambrakis, una alianza de izquierda con la que obtenía su acta de diputado; y, posteriormente, por su oposición al golpe de estado de la extrema derecha, propiciado por la junta de los coroneles (1967-1974), que le llevó a la clandestinidad, a su detención, reclusión y destierro; aunque, en 1970, dada la presión internacional, fue liberado y se exiliaba en Francia hasta su retorno definitivo a su país de origen, tras su vuelta al sistema democrático, siendo elegido diputado por el Partido Comunista en la década de los 80 y designado más tarde Ministro de Cultura en el Gobierno de coalición entre conservadores y comunistas presidido por Constantino Mitsotakis (1990–1993).
Desde siempre Theodorakis fue un acérrimo defensor del establecimiento de
buenas relaciones entre Grecia y Turquía y mostró su posición contraria a
la guerra de
Kosovo (1998-1999), a la invasión de Irak (2003), como a la
aplicación de medidas
de austeridad impuesta a la sociedad griega (2010) por el rescate económico de
la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional.
Theodorakis, además de sus cualidades como director de orquesta e instrumentista, cuenta con más de un millar de obras cuyas raíces se asientan en el mundo poético griego y en los poemas de Pablo Neruda (“Canto General”) y García Lorca (“Romancero Gitano”), junto a su amplio legado de bandas sonoras cinematográficas, composiciones interpretadas por los Beatles, Édith Piaf y Shirley Basses y sus incontables obras sinfónicas, rapsodias, óperas, música de cámara, oratorios y cantatas, música para bailes, ballets, teatro e himnos...
Hasta siempre Mikis
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