No
podemos seguir cerrando nuestros ojos y no queremos mantener silencio cómplice
por más tiempo, ante las atrocidades cometidas por los gobiernos nacionales y
los organismos internacionales, frente a aquellas mujeres y hombres que deciden
cruzar fronteras, arriesgando su propia existencia, en la búsqueda de una
esperanza de vida que su territorio natal les niega, causado por razones
internas (económicas, políticas, sociales, conflictos bélicos, etc.), como por
las injerencias, imposiciones y condicionamientos externos
Una
realidad que es el resultado de un modelo basado en el desequilibrio y en la
desigualdad, entre países ricos (que expolian y explotan) y países pobres
(explotados y desestructurados en todas sus parcelas).
Consecuencia
de ello, el drama de la emigración tiene múltiples aristas que atentan contra
el ser humano, contra el emigrante y su familia, que sufren vejaciones y
muertes durante su traslado, a manos de grupos mafiosos que se lucran con el
tráfico clandestino, con la trata de personas; y por el maltrato condenatorio
legal y social en los países de destino, a través de comportamientos xenófobos,
de exclusión, marginalidad, explotación laboral, ausencia de derechos básicos,
etc.
¡BASTA
YA de mentiras! ¡BASTA YA de vulneraciones de derechos y libertades sociales!
Exigimos
el cumplimiento de los Derechos Humanos, el respeto a los principios
constitucionales, la aplicación efectiva de los convenios internacionales, así
como, la introducción, adaptación e incorporación pertinentes y necesarias en sus articulados que garanticen la dignidad de los emigrantes.
REIVINDICAMOS EL DERECHO A LA LIBRE
CIRCULACIÓN Y A LA PROTECCIÓN DE LOS DERECHOS BÁSICOS DE LOS EMIGRANTES
Cuenca (Ecuador) a
19 de diciembre de 2020
Erick Jara Matute
Pamela Tacuri
Jonnathan Fernando Uyaguari Flores
Jenny Elizabeth Padilla Cáceres
Bryan Steven Parra Campoverde
Janneth Auqui Lema
Edgar Cordero Coellar
José Manuel Castellano Gil
Editorial Centro de Estudios Sociales de América Latina
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